Nombre Diana
Lugar de la experiencia: Cerca del corte inglés de nervión. En una calle perpendicular a la avenida Kansas City. Sitio muy indiscreto.
Tarifa contratada: 40 euros que al final fueron 30 (lo único bueno de la experiencia, lo explico con más detalle en el "tocho")
Duración real del servicio: media hora aproximadamente
Anuncio: http://www.pasion.com/contactos-mujeres ... 343754.htm. Fotos "reales" con toneladas de Photoshop. Sólo pude reconocer esos pezones. En lo demás está más pasada de peso.
Físico: Rasgos sudamericanos, diría que más cerca de los 50 que de los 40, bajita y con algo de tripa, aunque con buenas tetas naturales.
Francés: Normal
Griego: NO.
Besos: Algunos picos.
Folleteo: Quiere llevar la voz cantante, aunque si insistes se deja hacer. Nula implicación. Sólo quiere que termines cuanto antes.
Implicación ( solo numeros del 0-10 ): 0
Bien, sigo queriendo catar una madura que folle como un demonio y no se suba a la parra con los precios, llamo a esta, por teléfono parece muy amable, y siempre con el "sí, cariño", "claro, mi cielo", etc. Quedo con ella para una hora después, el sitio es jodidamente indiscreto, pues hay que abrir una verja que da a la calle (en una zona "residencial") y después hay que subir unas pequeñas escaleras) y cuando te abre la puerta hay que subir otro piso más. Al entrar veo a una madurita que no está nada mal, y me dice que no haga mucho ruido porque la dueña de la casa vive en el piso de arriba (ya empezamos), al parecer no sabe a qué se dedican...porque oigo más voces en el piso y no son de las voces de las que habla Iker Jiménez. Una voz es claramente de una mujer y otra me parece de un hombre. Pero bueno, yo a lo mío. Pasamos a una habitación preparada para el tema, me pregunta cuánto tiempo voy a estar y le digo "me dijiste que por 40 euros podíamos echar dos polvos sin prisas, verdad?" y me dice que 40 euros es media hora, que si quiero estar 45 minutos son 50...como no la conozco, tengo muchos tiros daos y encima no es lo que me dijo por teléfono (y ojo! que si pones diez euros más al precio que sea, se pone un arnés y te folla el culo!!) le digo que entonces media hora. Y atención: le digo "te dejo el dinero en la mesita de noche o te lo doy a ti?" Y me dice "dámelo". Se lo doy y empiezo a quitarme la ropa. Después volveremos a esto.
Me ofrece una ducha, y acepto, y sigue hablando en plan cariño, mi amor, etc...vale. Entonces me dice que pase a secarme a la habitación "para no ocupar el baño". Volvemos a la habitación, se quita la ropa, me dice que me tumbe y empieza a chuparme la polla, para mí sin mucho entusiasmo, pero bueno. Cuando no lleva ni un minuto me dice "quieres comerme el coño?" le digo que sí y se pone en posición de 69 (lo tiene depilado y está limpia) pero cuando no llevamos ni dos minutos me dice que me corra ya, le digo que no, que siga, y me dice que como es el primero que me corra ya y después estamos más tiempo en el segundo. Le digo que aún no, que quiero follar, así que me pone un condón y se pone a cabalgar, también sin mucho esmero aunque al menos le estoy lamiendo esos pezones con los que se puede picar hielo. Después se pone en misionero, después a cuatro patas y cuando le digo que me quiero correr en sus tetas me dice "espera, espera!!" coge corriendo una toalla, se sienta en la cama, se pone la toalla sobre las piernas y empiezo a pajearme mientras me acaricia...cuando es evidente que voy a soltarle lo más grande me agarra más fuerte y cuando le echo todo el grumo por las tetas y los brazos empieza a quejarse y a decir "te odio"...al principio pensaba que estaba de broma...pero aquí, queridos amigos, empieza el espectáculo. A partir de aquí NO PARA DE QUEJARSE y de decir que vaya tela, que mira como la he puesto, que he manchado hasta las sábanas y ella duerme ahí, que el otro día uno le manchó hasta la pared, que por qué a los hombres nos gusta hacer eso, que así no puede atenderme...a lo que yo le digo "pues ve a ducharte"
pero ella sigue con lo suyo, y ya no sé si es paranoia mía o no pero me parece escuchar voces fuera, y ella sigue, que no entiende que quiera hacer eso, que si pinches hombres que se creen que tienen una manguera, que si esto, que si lo otro, la verdad es que ya empieza a tocarme los cojones, y no en el sentido al que iba en un principio, pero, lo único positivo de todo esto, es que me dice "te voy a devolver diez euros" (la media hora la tiene a 30), pero, y aquí volvemos al principio, me dice "POR CIERTO, TÚ NO ME HAS DADO EL DINERO, NO?" ahí ya me pongo serio y le digo que es lo primero que hice al entrar en la habitación, que le pregunté si lo dejaba en la mesita o se lo daba en la mano y me dijo que en la mano, que busque bien, total, que me da los diez euros y empiezo a vestirme mientras sigue con la retahila, que por qué hacemos eso, que no lo entiende, a lo que me dan ganas de levantarme y decirle PUES CUANDO TE PREGUNTEN POR LOS SERVICIOS DI QUE NO ACEPTAS QUE SE TE CORRAN ENCIMA!, pero prefiero evitar problemas e irme de allí cuanto antes, que al menos voy descargado 
(y por cierto al salir veo que hay una chica en la cocina).Lo dicho, probablemente sea lo más bizarro que me ha pasado en este mundo, y es otra muestra más de cómo está el panorama puteril, de muchas, cada vez más, que sólo son profesionales para poner la mano; trato a todo el mundo con el máximo respeto, y si pregunto los servicios y una chica me dice que no hace X servicio, ni se me pasa por la cabeza hacerlo, si me interesa busco a una chica que haga X. Pero ponerse una toalla en las rodillas y esperar a que le dé la leche para después estar diez minutos quejándose me parece de impresentable. Así que si la quereis probar mejor ahorraros esos treinta euros y los guardais para una que de verdad os guste y sepais que vais a salir descargados y contentos.
Y aquí termina mi tocho.
Salud y buenos polvos.
